martes, 3 de junio de 2014

Esta mañana

Esta mañana indefinidamente triste, 
levemente cubierta de congoja, 
agobia con su peso al aire mismo 
llenando todo de esperanzas. 

De súbito deja de lado su capacidad de espectar,
ya no acompaña mas y se vierte en si misma,
derramando cercanías descomunales
que en realidad no son mas que la misma 
lejanía-ausencia reconocida. 

Esta mañana indefinidamente triste 
vuelven los acertijos y los vacíos de siempre, 
se enroscan en mis dedos 
y en mis ojos 
tornándolo todo 
en lugares olvidados. 

Esta mañana indefinidamente triste, 
parece solo presentarse
la irremediable necesidad de andar y andar, 
sin buscar nada, 
sin querer alcanzar nada, 
solo andar por el hecho de hacerlo. 

Para dejar en el camino, 
convertidos en sudores 
aquellos sueños rotos. 

Esta mañana indefinidamente triste, 
queda apenas el recuerdo 
de los últimos besos que robe, 
queda apenas la certeza de la presencia del amor 
que se niega a quedar desvanecido, 
aquel que vuela cada vez mas lejos. 

En mis alforjas llevare un recuerdo, 
una caricia y un Te quiero, 
una piedrita blanca regularmente redonda, 
cuatro papeles escritos con lo básico de la vida, 
tres miradas tiernas,
todas las sonrisas que consiga, 
dos fotos viejas, 
la confundida certeza de tu melodía 
torpemente tarareada por mis labios, 
la sensación de una mordida en el brazo. 
Con ello andaré y andaré. 

El Sol acaricia el césped 
de una manera tan suave 
que apenas su brillo 
como guiño sonriente 
lo calienta. 

Junto con la brisa entonan el rumor 
de una vieja canción. 

Una rama pareciera vestir una reluciente alhaja, 
es el Sol interrumpido por un instante. 
Pareciera que su risa se expande 
profunda y estremecedora. 
Dando vida a todo. 

Las hojas de los arboles 
se incorporan con una polifonía nunca aprendida, 
es la misma, tal vez no? 
El calor esta vez es añorado, 
no mucho quizás. 
Un aroma me recuerda la noche, que llegara pronto. 
Asumo de nuevo lo sentido 
y una vez mas me echo a andar. 

Y este andar parece mas al deambular 
de quien vaga sin Sur o sin Nor-este, 
es mas quererse alejar de si mismo, 
aunque no se sepa.

Caminar por el polvoriento arenal de la soledad
o de la cegadora nieve de los polos de mis labios
Andar hacia el unico lugar al que se que iras
Al Mar

Junio 2007